Optimizando la Eficiencia Energética: Aislamiento en Cámaras de Aire

En el panorama actual de la arquitectura española, se destaca una oportunidad crítica para mejorar la eficiencia energética de los edificios. Un alto porcentaje de las estructuras existentes ostentan una calificación energética entre E y G, reflejando un considerable margen de mejora tanto en términos medioambientales como en confort interior. Una solución clave para este desafío es el aislamiento térmico, particularmente a través del método de insuflado en cámaras de aire, una estrategia efectiva para elevar la eficiencia energética de las edificaciones.

Entendiendo las Cámaras de Aire

Las cámaras de aire, comúnmente encontradas en fachadas de doble hoja, históricamente se consideraban beneficiarias por su capacidad de aislar térmicamente; sin embargo, estudios recientes desacreditan esta noción, revelando que las cámaras de más de 2 cm de espesor no ofrecen el aislamiento esperado debido a corrientes de convección y filtraciones de aire que anulan sus propiedades aislantes. La solución: rellenar estas cámaras con material aislante.

Identificación y Viabilidad

Determinar la presencia y viabilidad de aislamiento en una cámara de aire involucra una evaluación técnica meticulosa, considerando factores como el año de construcción del edificio, el espesor total del cerramiento, y el análisis por parte de un técnico experto mediante herramientas como cámaras termográficas.

Opciones de Aislamiento

El mercado ofrece diversas opciones para el insuflado de aislamiento en cámaras de aire, cada una con sus ventajas específicas:

• Celulosa: Reciclada, con propiedades ignífugas y fungicidas, excelente para aislamiento térmico y acústico.
• EPS (Poliestireno Expandido): Ligero, resistente a la humedad, y reciclable.
• Lana Mineral: Incombustible, excelente aislante térmico y acústico, no hidrófila.
• Corcho Natural: Ecológico, duradero, y con buenas propiedades de aislamiento.
• Poliuretano Granulado: Baja conductividad térmica, inerte e imputrescible.

La mejora de la eficiencia energética a través del aislamiento insuflado en cámaras de aire representa una estrategia económica y eficiente para potenciar el confort interior y reducir el consumo energético.

La elección del material aislante adecuado, evaluada por profesionales, y una correcta ejecución son fundamentales para el éxito del proyecto, subrayando la importancia de una rehabilitación energética bien planificada que beneficie tanto al usuario final como al medio ambiente. Este enfoque no solo mejora la calidad de vida de los ocupantes sino que contribuye significativamente a los objetivos de sostenibilidad y eficiencia energética en el sector de la construcción.

Fotografías:

Fotos de Erik Mclean y Marc Wieland en Unsplash